Muchos propietarios de perros piensan que el césped artificial se estropearía, si sus mascotas juegan, corren y hacen sus necesidades encima de un césped artificial. Esto es totalmente erróneo. De hecho, el primer jardín de césped artificial que hicimos en la Costa del Sol en el año 2006, fue precisamente a causa de que no había manera de mantener el césped natural en condiciones. tenían un pastor belga que se pasaba el día corriendo alrededor de los árboles, dejando surcos bien profundos en los que no crecía ni una mala hierba. Ahora, 12 años después, entre el pastor belga y dos collies, el césped artificial sigue casi tan bonito como el primer día.
El césped artificial es un producto muy duro. En sus orígenes fue inventado para los campos de deporte, y para ello tenía que ser muy resistente. En los 12 años que llevamos instalando césped artificial, aún no hemos visto un perro que haya sido capaz de romperlo.
Otros dueños de mascotas dudan de si a sus perros les va a resultar cómodo jugar en un césped artificial. Nosotros estamos convencidos de que es les encanta. Porque lo vemos todos los días. En nuestra casa tenemos 4 perros y ellos siempre eligen estar en el césped artificial. Incluso lo tenemos en el maletero del coche dónde los llevamos.